Los tiempos de Samuel
3 Abr, 2025

Por: Carlos Rivera

1.-INTERMEZZO

Va caminando el Dr. Samuel Lozada  por las calles de Arequipa las cuales se conoce  de punta a punta. Va observando, como Juan Guillermo Carpio Muñoz, una ventana, un solar, una nueva edificación  y saluda a los ciudadanos   con cortesía inglesa.  Lo sigo con la mirada en medio de sombras y voces de las gentes. Está con su impecable  terno, quiero decirle algo sobre un libro de periodismo. Se da cuenta de mi presencia y  me dice que le cuente del porqué de mi pesquisa. Subimos a su despacho de la calle Jerusalén, me dispongo a sentarme y me ofrece la comodidad de su oficina. Entonces, mis manos se mueven emocionadas y voy cavilando mi perorata ante el Dr. Samuel. Se sienta con cuidado, me pone atención y veo entre la ventana del despacho una bruma que atraviesa toda la  escena y siento que eso que llamamos realidad  se va diluyendo  como en una ficción de Jorge Luis  Borges. Mis manos desaparecen y con ellos la imagen del preclaro hombre. Despierto triste en mi cama porque sé qué hace unos años partió a la eternidad celestial dejando en los corazones arequipeños una inconmensurable tristeza por su muerte y preclaro magisterio.

2.-LOS SENDEROS QUE SE BIFURCAN

En esta calurosa mañana de hoy miércoles 2 de abril nos reunimos sus amigos que lo quisimos y los representantes de las instituciones que él ayudó a  forjar con sus capacidades de gestor y hombre de cultura. Su gravitante espíritu e indomable corazón por la tierra lo ha llevado por diferentes caminos y horizontes que en algunas personas  como nosotros nos es casi imposible asumir hoy en día por las peripecias que la tecnología ha puesto en nuestras vidas o porque somos fruto de los tiempos sin anarquías o miradas de largo aliento para el futuro. Ya no tenemos tiempo para  reflexionar, estudiar el ejemplo y dedicarle nuestras cortesías  a los seres que entregaron su vida a forjar hombres y mujeres.  Ante esta negativa realidad nos rebelamos hoy y le plantamos cara a creer que nuestro país no tiene futuro o que  ya fuimos como colectivo. Porque hombres como Basadre quien no solo estudió nuestra historia y sus diversas etapas republicanas sino que quiso crear un espíritu  nacional, la voz de un verdadera elite capaz de comandar las batallas contra nuestras miserias. Y eso es precisamente lo que fue el Dr. Samuel un constructor de almas y voluntades.

El Dr. Vladimiro Bermejo dijo del gran tribuno Francisco Mostajo que fue “un hombre de múltiples actividades intelectuales” y esa era una de las grandes características de  una generación ilustre que nos acompañaron en los últimos años como Eusebio Quiroz Paz Soldán, Carlos Ramos Núñez, Juan Guillermo Carpio, Héctor Ballón Lozada, Eduardo Ugarte y Chocano entre otros. Ellos  fueron personalidades rozando las humanidades, la filosofía, el arte, la cultura y el derecho y eso precisamente los hacia espíritus abiertos, de mentes claras y  con una  enciclopédica  cultura. Y  como hijos de esta tierra  fueron volcánicos y rebeldes.  

El estilo define la virtud del hombre, traza su voluntad con una perspectiva estética que se alimenta de su espíritu y sus deseos que son su “motor de combustión interna” parafraseado un libro del poeta Oswaldo Chanove. Es por ello que cuando anunciamos este homenaje los comentarios que aparecían  en redes sociales eran: “decente”, “maestro”, “virtuoso”, “ejemplar”, “profesional a carta cabal”…  ¿cómo un ser humano puede despertar inmediatamente tanta admiración?  Si uno ve cada cosa que hizo, cada emprendimiento, sus artículos periodísticos, su labor como docente, sus vínculos con  el arte, la cultura, su pasión por el derecho y la dedicada vida de hombre de leyes  que desarrolló desde su despacho, entonces nos daríamos cuenta que fue  un  hombre extraordinario.

El filósofo norteamericano Emerson dijo lo siguiente:  “dentro de los límites de la educación y la capacidad de acción humanas, podemos decir que existen grandes hombres para que haya hombres aún más grandes”. En la vida del Dr., Samuel, hallamos ese dictamen sobre los destinos de sus discípulos y admiradores. Todos con un granito de arena fuimos y seremos sus seguidores, trataremos desde nuestras fuerzas y pequeñas voluntades  imitar   su gigante humanidad y grandiosa capacidad creadora.

 Discurso leído el 2 de abril,2025. Homenaje al Dr. Samuel  Lozada Tamayo en el  Teatro Arequepay de la Municipalidad Provincial de Arequipa.

CARLOS RIVERA
Arequipa-1976

Escritor. Es autor Antropología de mis sentimientos (Sophia 2024), Apuntes intimistas para espíritus vulgares (Quimera, 2020), El arte de lo posible. De política y otras majaderías (Centro de Estudios Liberales, 2017), Entre libros (Texao Editores, 2016).
Editor y compilador de Hugo Neira: la ilustración de nuestro tiempo (Fondo Editorial de la Universidad Católica de Santa María, 2021), Hasta que la muerte (o el amor) nos separe (Quimera, 2019), Eusebio Quiroz Paz Soldán: entre Arequipa y la historia ( La Ciudad,2019), La memoria y la vida. Discursos. Tomo I(Quimera,2018); Pre-textos para marcar la cancha(Quimera,2017); del libro homenaje al Premio Nobel de Literatura 2010, Mario Vargas Llosa, Arequipa y el escribidor (Gobierno Regional de Arequipa,2016).
Dirige la revista Cuadernos de pensamiento. Colaborador del diario Arequipa al día (1999-2005). Responsable de la página cultural del semanario VISTAPREVIA (2016-2018). Articulista del diario Exitosa (2016-2018) y Los Andes (2017-2019).
Actual colaborador de El Montonero y Limagris y del diario EP.
Condecorado con la Medalla de la Cultura del distrito de Cerro Colorado (2018) y la Medalla de la Cultura por la Municipalidad Provincial de Arequipa (2019).
Dirige el Centro de Estudios ÁGORA. Debate y pensamiento.

Autor

Comunicados

Campañas

¡Atención comunicadores!

Atención comunicadores se viene un seminario organizado en alianza entre el Colegio de Periodistas del Perú – Consejo...

Convenios

Noticias