Un 5 de julio de 1833 falleció el histórico francés, Joseph Niépce, considerado uno de los inventores de la fotografía, fue un visionario de la era moderna, fue reconocido por su papel en el desarrollo inicial de la fotografía, sentando las bases para una de las formas de arte y documentación más influyentes de todos los tiempos.
En 1824, colocó piedras litográficas recubiertas de betún en el fondo de una cámara obscura, logrando así obtener la primera imagen permanente de un paisaje en la historia. Sin embargo, este logro requería exposiciones extremadamente largas, a veces de varios días bajo la luz directa del sol.
A partir de 1825, Niépce comenzó a utilizar regularmente placas de cobre como soporte para sus experimentos fotográficos. Luego, en 1826, perfeccionó su técnica al emplear placas de estaño grabadas, lo que marcó un avance significativo en la captura de imágenes mediante procesos químicos y ópticos innovadores para la época.
Primera cámara de Niépce
El visionario detrás de la primera fotografía permanente conocida, dejó un legado en la historia visual y el desarrollo de la fotografía hasta la actualidad. Su creatividad e innovación continúan inspirando a día de hoy, a artistas, científicos y fotoperiodistas.
Fotografía de Joseph Niépce