Por: Katherin Huamán.
El reciente asesinato del periodista Raúl Celis en Iquitos, ocurrido mientras se dirigía a su centro de trabajo, ha reavivado las alarmas sobre la seguridad de quienes ejercen el periodismo en el país. Aunque las investigaciones continúan, este hecho se inscribe en un contexto de creciente hostilidad contra la prensa, precisamente a días de haber conmemorado el Día Mundial de la Libertad de Prensa.
Según el informe Termómetro de Libertad de Prensa, elaborado por la Asociación Nacional de Periodistas del Perú (ANP), en los primeros cuatro meses de 2025 se han registrado 101 ataques contra periodistas y medios de comunicación. La mayoría corresponde a hostigamientos y amenazas (34), seguidos por agresiones físicas o verbales (24), discursos estigmatizantes (22) y diversas formas de presión institucional.
El caso más grave documentado hasta la fecha es el asesinato de Gastón Medina, periodista de Ica, en enero de este año. A la fecha, no hay resultados concretos en las investigaciones. Medina había denunciado actos de corrupción en distintas instituciones regionales y municipales, lo que agrava la sospecha de un crimen vinculado a su labor informativa.
Preocupa, además, que el 50% de los agresores sean funcionarios públicos, siendo el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, quien encabeza la lista con 14 episodios registrados. Datos como este reflejan un preocupante patrón de violencia institucional hacia los trabajadores de prensa.
Desde el Colegio de Periodistas de Arequipa (CPP Arequipa), queremos expresar nuestra más profunda solidaridad con la familia y a los colegas de Raúl Celis, así como con la comunidad periodística de Iquitos, afectada por este trágico suceso. Este acto de violencia no solo atenta contra la vida de un profesional, sino contra la libertad de prensa, un pilar fundamental de nuestra democracia.
Asimismo, reafirmamos nuestro compromiso con la defensa de la libertad de expresión y exigimos garantías reales para el ejercicio del periodismo en todo el territorio nacional. No puede haber democracia sin prensa libre ni periodistas seguros.
